Siguiente >

La etapa presenta dos alternativas: La, llamémosle, histórica que atraviesa «a derecho» los Pirineos por el Collado de Bentartea al igual que lo hicieran Napoleón y Carlomagno para invadir la Península Ibérica así como millones de peregrinos durante siglos; y la obligatoria durante los meses de noviembre, diciembre, enero, febrero y marzo (por aquello de la nieve y la niebla) por la carretera atravesando la localidad navarra de Valcarlos a medio recorrido. Fuera de los citados meses y si la climatología es complicada, también es recomendable ir por Valcarlos.

Este es el punto en el que hay que optar por la llamada Ruta de Napoleón o por Valcarlos (a la derecha):

 

Por el itinerario de Valcarlos no hay más que seguir las indicaciones pertinentes, siempre a pie de carretera o muy cerca de ella. Incluso por aquí, hay que caminar con precaución en invierno o en fechas próximas. Antes de llegar a Valcarlos (11km), se pasa por la última localidad francesa: Arnéguy (8 km).

Por el Collado de Bentartea, la etapa transcurre por las siguientes ( y diminutas) localidades antes de llegar a Roncesvalles: Honto (5 km) y Orisson (7km) y Roncesvalles (24 km).

Existe la posibilidad de iniciar la etapa en Honto y Orisson si los albergues de estos enclaves están abiertos (5 y 7 km menos). Para nosotros se pierde la magia de realizar una etapa histórica a lo grande iniciándola al amanecer en el que muchos consideran el pueblo más bonito del Camino Francés: Saint Jean Pied de Port/Donibane Garazi.

El recorrido es realmente duro ya que se atraviesan los Montes Pirineos y se salva un desnivel acumulado de más de 1.700 metros, 1.250 de subida y casi 500 de bajada. No hay matices; subes hasta cruzar los Pirineos y luego bajas también de forma pronunciada hasta llegar a Roncesvalles.

La etapa se desarrolla en su mayor parte en territorio francés donde las señalizaciones son distintas a las existentes en España.

Os encontraréis principalmente con las franjas rojas y blancas propias de los GR (el 65 en este caso):

 

 

 

 

 

También aparecen algunas flechas amarillas y conchas recientemente pero no muchas:

No hay que prestar más atención que a las indicaciones y al aumento de los latidos de tu corazón que acusará las pronunciadas subidas pero también te agradece haber decidido peregrinar hacia Santiago.